21 de julio, sábado. La Paz.

Al otro día nos levantamos muy descansados y bajamos al bufet libre para desayunar esos ricos alimentos que Jesús tan bien sabe describir en su cuaderno de viaje. La comidilla del comedor fue el desconcertante desmayo de Jesús. Después, desde la misma habitación llamamos a España, a nuestra gente para que supiera que habíamos llegado…